Se acerca la soltería, y tras ella, las bodas.
La soltería es llamada alrededor del centro del mundo como "despedida de soltero". Demasiadas letras. Yo personalmente pienso que con una sola letra se describe a la perfección el día en que todo el mundo pierde el norte, unos más que otros, y se emborrachan sin mesura. Yo suelo ser de los que mueren por un día. Normalmente tengo mi mañana en la que estoy callado, casi ausente. Digo alguna tontería, hablo con alguien, normalmente conocido, y paso desapercibido. Tras la comida llegan los "cubatas", si quereis aqui podeis saber su origen, y ver varias formas de prepararlo. Pero en estos casos el rey es el ron con cocacola o el whisky con cocacola.
Yo he ido, desgraciadamente a unas cuantas solterías, diría que demasiadas. Algunas son de familiares, las menos, otras de amigos, y luego de músicos.
Las de músicos son las que más me gustan.
Recuerdo una en la que tras la soltería, nos pusimos a tocar por todo el pueblo estilo charanga. Al llegar a la glorieta, nos subimos a una tarima y empezamos a hacer el tonto, mientra más y más gente se arremolinaba alrededor nuestro. Cuando decidimos que ya era suficiente, la gente no hacía mas que aplaudir y gritarnos para que volvieramos a tocar más cosas. Quizá suene a estupido, pero recuerdo que me lo pasé muy bien, y lo mejor, ¡¡se me paso la borrachera!!.
Sin Embargo en otras ocasiones, en que la soltería es de algún amigo o familiar, lo que me ocurre es que al final del día tengo un dolor de cabeza tan impresionante, casi sin lugar a dudas debido al sol, que tengo que tumbarme a dormir la siesta en cualquier lugar, con el peligro que conlleva, de que te muerda un perro, etc.
Bien, pues este fin de semana, no tengo una soltería, tengo dos solterías, con sus correspondientes dos bodas, pero eso es otra historia.
Bueno, ya contaré a mis mudos lectores la historia de mis solterías.
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