Yo ya había estado, pero había que ver las típicas cosas que hacen de Londres la ciudad que es: Londres. Es decir, el Parlamento, Buckingham Palace, Tower Bridge, etc, etc. Y por supuesto Candom-Market, con su gran tienda "cyberdog". Si señor, ropa para ir los domingos a la catedral de St Paul.
A parte de Londres, visitamos Canterbury, o como se dice en la lengua de Shakespeare; cánebury, así pero con a e, u e y chiquitita chiquitita.
Allí visitamos el pueblo entero, la catedral gótica que es impresionante, el colegio King's School, y alrededores, así como algún que otro jardín. Por cierto buen colegio, por si quereis mandar a vuestros hijos, solo vale 6000 libras o más al mes. Y les enseñan disciplina, cosas como por ejemplo a no pisar el cesped salvo si eres de último curso y si es el primer o último mes del curso. Eso si, tu hijo se codeará con el hijo del rey de Abisinia o el príncipe de Surrinamma, y sitios así.
Este pueblo es un centro de peregrinación cristiano, en concreto anglicano, hoy en día, y esta inspiró a Geofrey Chaucer los populares "Los cuentos de Canterbury", que sinceramente recomiendo, ya que, aunque alguno es un poco ñoño, también los hay que son tremendamente divertidos. Y espiritualmente se trata del equivalente al anglicano del Vaticano para el catolicismo. El Arzobispo de Canterbury sería como el Papa de Roma
Tras la visita a Canterbury, o, como averigué realmente más tarde que se pronunciaba: "canbry", mas o menos, volvimos a Londres, o london, con la boca como para escupir. Allí terminamos de visitar los monumentos así a lo gordo, rapidito, rapidito.
También visitamos barrios como Covent Garden y su mercado de las manzanas, donde echamos un par de libras a un pobre muchacho que, como el de la peli "Once" intenta sobrevivir en el estrecho mundo que dejan las descargas P2P, y barrios como Chinatown, que es chiquitito, pero huele a comida china, o al menos como comida china de chinatown, y al barrio del soho, que, bueno, enfin. Tampoco es para tanto y a las 11 cierran los bares.
Y respecto a los pub, solo os puedo decir, que o veíamos monumentos o veíamos bares, por que en cuanto sonaba el "last one" a los quince minutos chapaban. Y esta vez no estaba mi colega Madrid para llevarnos a sitios interesantes. Tampoco habríamos tenido tiempo, la verdad. Aunque más de una cervezaca cayó. Como debe ser.
Consejos para viaje: Si tienes que llevar la maleta a una consigna y has de elegir entre una estación de autobuses y otra de tren, al menos en Victoria Station y Victoria Coach, elige la de autobuses, la coach, vale la mitad. y 7 libras son 7 libras.
